Al encender esta vela, te transportaras a un atardecer tropical lleno de exotismo y frescura. El jazmín brasileño envuelve el ambiente con su sensualidad vibrante, mientras las notas florales de jamaica aportan un toque chispeante y audaz. La dulzura del lychee añade una caricia tropical que recuerda a mercados llenos de vida. El haba tonka brinda calidez especiada, y el almizcle blanco cierra la experiencia con una suavidad etérea, creando un equilibrio perfecto entre lo exótico y lo familiar, ideal para momentos de paz y conexión.
